lunes, 22 de diciembre de 2008

Penderyn




Single Malt

Gales

Embotellado por la destilería

46,00% vol

Llevo un montón de tiempo sin colgar nada por aquí, así que hay que subsanarlo. Tengo unas cuantas notas que ir publicando, cosa que hare en las próximas semanas. Por ahora, voy comenzando con este single malt atípico. Atípico por varios motivos: producido en Gales (si bien hay precedente histórico y también se producen whiskies en Bretaña), acabado sistemáticamente en envases de Madeira después de pasar por madera de Bourbon y destilado de una sola vez en un alambique de pote pero que tiene una columna tabicada con placas encima, con lo que queda a medio camino entre un pot-still "normal" y el sistema que emplean para el Armagnac (sin embargo, en Escocia también hay un artilugio similar, el Lomond still, pero es prácticamente una rareza).

A la vista muestra un color pajizo poco intenso que denota corta edad (se agradece que no hayan hecho trucos con caramelo). La nariz es muy aromática y abierto, con mucha fruta, principalmente manzana y piel de melocotón con notas de corazón de gominola y ribetes tropicales. Está presente también un matiz de pino y cedro que recuerdo que también había en el (tristemente desaparecido) Glenmorangie Madeira Wood Finish, por lo que supongo que es atribuible al acabado. Además, tiene un claro tono de disolventes y acetona y acompañan ciertas notas vegetales (tallo de hinojo, posiblemente). En conjunto, da una impresión que recuerda algo al orujo blanco del país.

En boca presenta notas similares, sobre todo las afrutadas y de gominola, en una impresión ligera pero en cierta contradición con un cuerpo poco denso pero con una sensación táctil algo basta y en el límite de lo metálico, que es lo que permanece en el acabado mientras se desvanece la futa. Recuerda una vez más al aguardiente de orujo (será cosa de la juventud?).

En suma, tiene por una parte complejidad y un carácter franco y pronunciado, sobre todo en la nariz, y bastante complejidad además de resultar bastante individual, si bien, por otra, queda mucho por pulir, particularmente en el paladar y el final. Lo dicho: es como el punto medio entre un single malt escocés y un orujo gallego.

domingo, 28 de septiembre de 2008

Glenmorangie Quinta Ruban



Single Malt

Highlands

De edad se supone que básicamente 12 años

Embotellado por la destilería

46,00% vol

Ya estoy de vuelta de las vacaciones (con el fresco del otoño vuelve uno a la actividad, además de que en verano tiendo a beber menos destilados, exceptuando los G&T) y con una botella nueva, así que aquí estamos comentando el material. Como ya había dicho en el post sobre el Glenmorangie Port Wood Finish, Glenmorangie ha pasado por un importante cambio de imagen (y no sólo de imagen; también hubo cambios en la gestión de la destilería) similares a los de otras marcas como, notablemente, Dalmore, que pasan a acentuar más el aspecto de lujo/exclusividad y todas esas cosas, pasando por encima del de tradición/artesanía (compárense, por ejemplo, la etiqueta de los ABC wood finish con la imagen tipo grabado antiguo con las actuales; por cierto, la botella de ahora está muy bien y las etiquetas no tienen ninguna pega evidente, pero a mí las cápsulas de plástico no me acaban de convencer, aun reconociendo que es un tema bastante intrascendente). Como había dicho entonces, el PWF pasa a convertirse en el Quinta Ruban, por lo que creo que lo más razonable es compararlos.
Para empezar, se nota bien la subida de alcohol: la pegada en nariz es bastante intensa y, en boca, frente a la entrada aterciopelada y golosa que tenía la versión anterior, este es potente llegando casi a hacerse picante. No soy muy aficionado a cortar los whiskies con agua, pero este bien agradece una gota.
Por lo demás, se mantienen muchas de las notas definitorias del PWF, como el tono achocolatado y de frutos secos, especialmente nuez, la nota balsámica o el matiz floral (geranio sobre todo) en nariz, pero se añaden otros nuevos, notablemente un aire de almendra, tanto cruda como tostada (esta última especialmente clara en el final y acompañada de un nítido matiz avainillado) que no aparecía, cuando menos tan clara, en el PWF, y un carácter cítrico, entre naranja y pomelo, que aporta al mismo tiempo profundidad, fragancia y frescura. Cambian las cosas también con respecto al equilibrio whisky/oporto, ya que éste se desplaza marcadamente favoreciendo al primeiro y la fruta del vino tiene una presencia como mucho residual.
En términos generales, el QR gana en potencia y posiblemente tambén en complejidad, si bien no tiene, al menos sin diluir, aquel cuerpo goloso y amable que tenía el PWF (con todo, quizas se pueda corregir esto jugando con el agua añadida).

lunes, 8 de septiembre de 2008

Whisky Live en Barcelona

¿Cómo andamos después del parón veraniego? Por aquí saliendo del letargo; en un par de semanas espero volver a estar colgando comentarios a pleno ritmo (oséase, a pleno ritmo lento, pero en fin). Mientras tanto, aunque este no es un blog de noticias, me gustaría avisar de la celebración del Whisky Live en Barcelona el 5 y 6 de octubre. Yo no voy a poder ir, pero por los 15 euros que cuesta la entrada normal, me parece una iniciativa muy interesante. Mandad algún comentario los que vayáis.

Más información:
http://www.whiskylivespain.com/

jueves, 29 de mayo de 2008

The Balvenie DoubleWood 12 años



Single malt

Speyside

Embotellado por la destilería

40,00% vol

37,95 €

Llevaba tiempo sin escribir porque aún me queda material que trasegar, pero la gente de SMC tuvo la bondad de mandarme un poco de este biodiesel que no tomaba desde hacía un par de años, por lo que les estoy muy agradecido, así que aquí va el comentario en fresco.
El color en la copa es de oro viejo, sin llegar al ámbar ni al cobre, con brillos algo más claros. La nariz es abierta, con dos centros de gravedad: el afrutado y las especias. El primero deija percibir sobre todo un carácter cítrico (naranja) y de fruta de hueso, y el segundo aporta importantes notas de vainilla, de la canela que indican en las notas de cata y posiblemente comino, más un cierto matiz de brezo. En boca entra cálido pero suave, bastante pulido y con un cuerpo muy equilibrado. Aparece de nuevo la fruta de hueso de la nariz con algo del cítrico y con la infantería de especias que ahora se extende por el medio y el final, momentos en los que se hacen presentes también notas claras de jerez, con pasificados y frutos secos (nuez, almendra?) y un punto de café con leche. En términos generales, es un whisky amable, saboroso y no exento de complejidad que se le puede poner, p. ej., a un suegro que normalmente no beba single malt.

The Macallan Fine Oak 12 años



Single Malt

Speyside

12 años

Embotellado por la destilería

40,00% vol

No me voy a meter con el texto que aparecía (digo aparecía porque hace un montón de tiempo que no tengo en la mano una botella de Macallan del non-Fine Oak) en las botellas de Macallan y que comentaba que el whisky donde maduraba mejor era en envase de jerez. Todo lo esnobista que soy, supongo que cuantas más posibilidades ofrezca un productor, mejor para el consumidor (siempre, claro, que esto non afecte a outros productos), y parece que, admás, el tinglado del Fine Oak les ha funcionado, al menos cuantitativamente, bien. El whisky en sí tiene un color dorado con algún tinte más cargado. En nariz, lo primero que destaca es un vivo y pronunciado tono de fruta tropical (mango + lima?), aunque dedicándole un poco de tiempo empieza a aparecer un fondo que hace presagiar la carpintería que va a venir después (vainilla, coco , algo de palomita de maíz) más, por momentos, algún matiz pasificado. En boca, siegue claro el tono "tropical sabrosón", pero lo que pasa a percibirse es un marcado armazón de madera con cuatro pilares fundamentales que se van combinando y alternando: vainilla/toffee, mantequilla, coco y maíz tostado, en un desarrollo variado que se toma su tiempo y que transita por el peligroso borde de la astringencia. En suma, sápido pero ligeiro, vivo, sofisticado y muy centrado en el roble, lo que puede ser una recomendación o una advertencia.

domingo, 6 de abril de 2008

Highland Park 12 años



Single Malt

Islas (Orkney)

12 años

Embotellado por la destilería

40,00% vol

33,95 €

Caso chistoso de un whisky que tiene todo lo que un single malt escocés puede tener (humo notable, brezo, malta, algo de jerez...) pero hecho en un lugar complicado de encajar en el mapa etnográfico-turístico de Escocia (las Orcadas). En fin, yendo a la cuestión: color ambarino cobrizo. En el aroma aparece claramente, y ya al destapar la botella, humo fresco con un cierto matiz que sólo se me ocurre describir como asfalto. Este tinglado empireumático salpica un marcado carácter de brezo y de tarta de manzana (concretamente, y sobre todo con una gota de agua, hace pensar en la gelatina que queda por encima de las manzanas de la tarta o de las manzanas asadas) sobre un fondo malteado que algunos catadores describen como "miel". En la boca se van alternando todos estos descriptores (humo, tarta de manzana, brezo, malta, miel?, nota de jerez?) con vigor pero sin estridencias y con un gran equilibrio y proporción de los compoñentes. Como dije antes, tiene todo lo que se le puede pedir a un single malt escocés para dar y tomar pero todo sumamente cuidado: no es una bomba de humo como los del sur de cierta isla pero sí que farda de ahumado; no tiene el afrutado de algún Speyside, pero tampoco carece de fruta, ni anda escaso de peso y carácter ni tampoco de tonos florales.

domingo, 24 de febrero de 2008

Torres 20 Hors d'age


Brandy

Embotellado por Torres

Parellada (segun algunas fuentes también ugni blanc)

Roble Limousin

40,00% vol

30 €

Esta vez, y posiblemente sentando precedente, salgo de la parcela del whisky para meterme en los berenjenales del destilado de vino, por varios motivos: también me gusta el brandy (y la cerveza, y el vino, y el chocolate, y la música de Rameau, y...), soy un defensor de la biodiversidad (gastrodiversidad?) y mi abuela tuvo la bondad de regalarme esta botella. En fin, terminados los prolegómenos, vamos al trabajo: color cobre con reflejos ambarinos. En la nariz, franco, con notas florles (pronunciadamente de lilas), de ciruelas (pasas y damascenas muy maduras), especiadas y con un fondo de vainilla y pastelería con muy sutiles matices de maderas nobles que al ir terminando la copa van tomando un cierto tono de incienso. Estas impresiones se confirman en la boca, donde se hacen especialmente presentes las ciruelas y las lilas y, sobre todo, las especias, que hacen frente común en un claro carácter de comino. El cuerpo está caracterizado por una notable amabilidad contrastada con pinceladas del roble que quedan subsumidas en el carácter de comino.

domingo, 3 de febrero de 2008

Talisker 10 años



Single Malt

Islas (Skye)

10 años

Embotellado por la destilería (DIAGEO)

45,80% vol

33,75 €

Dorado intenso entrando en ambarino. En nariz, muy franco, destacan ya dos de los elementos que componen el carácter de este whisky: la malta y la turba, ambos intensos y complejos, con matices que se van intercalando y que dejan ver notas especiadas y marinas. Una vez que entra en la boca, la cubre completamente, con vigor y cuerpo. Es un whisky muy dulce, pero esta dulzura se ve perfectamente equilibrada (aunque a lo mejor "equilibrada" no es el término más adecuado para una sapidez así de marcada), después de una especie de pausa en el paladar en la que uno está a la espera a ver qué pasa, por dos complementos: la generosa dosis de turba más un tono picante (sí, "picante") que aumentan in crescendo hasta estallar en toda la cavidad bucal y en la garganta para después irse desvaneciendo entre notas yodadas (serán cosas de la sugestión, pero uno no puede evitar pensar en una ola rompiendo en la Costa da Morte). Una experiencia que uno siempre queda con ganas de repetir, sobre todo en días de frío. Se ve que es pariente de los Islays, potente, turboso y costero, pero sin tanta nota química/medicinal (esto no es un juicio, es una descripción). Imperativo conocerlo.

domingo, 27 de enero de 2008

Glenmorangie Port Wood Finish



Single Malt

Highlands

De edad se supone que básicamente 12 años

Embotellado por la destilería

43,00% vol

35,75 €

Parece que Glenmorangie ha estado reformando toda su línea, y los "X wood finish" xa no se producen más. Ahora ofrecen un Glenmorangie con paso por madera de Oporto que lleva el nombe de "Quinta Ruban"; yo estuve babeando un poco frente al escaparate de Arjeriz [un excelente establecimiento vigués] pero todavía no he tenido ocasión de probarlo. Sin embargo, aún quedan botellas de las versiones anteriores en las tiendas (conseguí ésta recientemente en Aqua Terrae, en Vigo). En fin, al trabajo: el color es muy profundo e interesante, dorado cargado/ambarino con un montón de matices que van del oro al piel de cebolla y casi al rojo, lo que se ve especialmente mirando la botella. En la nariz se comprueba claramente el "Port Wood Finish" (ruby, concretamente), con un carácter clara y abiertamente vinoso pero no monolítico, porque va acompañado de notas vegetales/florales (geranio, particularmente) y de ciertos matices de cedro, así como de una nota resinosa y por momentos algunos matices especiados y de frutos secos. En boca se presenta un panorama semejante en el que la nota resinosa que se percibía en la nariz pasa a convertirse en un carácter balsámico en medio de un largo y variado paladar caracterizado por su complejidade (que incluye notas achocolatadas) y por una extrema suavidad, así como por su tono dulce, mullido e intenso. En suma: muy vinoso, complejo, mullido y una excelente inversión.

sábado, 12 de enero de 2008

Cragganmore 12 años


Single malt

Speyside

12 años

Embotellado por la destilería (DIAGEO)

40% vol.

32,70 €

Color oro viejo bastante cargado. La cápsula dice "fragante", y no es ninguna mentira, porque la nariz destaca por eso, si bien no hace alarde de potencia. Complejo y plural, con notas de fruta (particularmente melocotón y albaricoque, con atisbos de cítricos) y matices florales (casi rosa por momentos) y herbales. En la boca se confirma la nariz en un amplio desarrollo del melocotón con los otros matices, pero estos últimos se amplifican, particularmente el carácter cítrico (piel de naranja fresca y confitada), y se añaden contrapuntos nuevos que tienen como trazos fundamentales un fondo de almendra/coco/mazapán u una muy sutil nota de humo que, unida a la anterior, resuelve en chocolate amargo en el final (tambin hay que decir que por momentos el roble asoma más de lo que personalmente desearía, pero no llega a deslucir). En líneas generales es, como ya se ha dicho, un destilado complejo que, con todo, y como se ve especialmente en el corpo, tira por el lado de la elegancia y de la sutileza y no por el de la fuerza, si bien esto no quiere decir que carezca de firmeza. Mejor como aperitivo que en la sobremesa (la madera y su carácter tirando a magro lo hacen parecer excesivamente amargo si se toma con algo mínimamente dulce).